viernes, 30 de diciembre de 2011

¡Feliz año nuevo!

Otro año que se va. Otro más y parece mentira lo rápido que pasa el tiempo.
Haber para despedir el 2011 como es debido tendría que empezar por agradecer a todas esas personitas especiales que han estado conmigo desde el principio hasta el final, a mi lado y ayúndandome a superar los malos momentos.
1. Gordo, tú eres y serás lo mejor ya lo sabes. Me has regalado un año increíble y sensaciones tan únicas como mágicas. Y ya lo sabes, que siempre es siempre. No lo olvides.
2. Chiquitinas mías, en especial a mi mona, que os quiero, ya lo sabéis y que sois únicas e inigualables, por lo menos para mí. No hay nada mejor que ustedes.
3. Danié que eres un tonto, todo el mundo lo sabe, jajaja, pero que te quiero mucho tío que eres de lo mejorcito que hay. Lo mismo os digo a los demás.
En fin que este año ha venido cargadito de momentos buenos, malos, regulares y peores y que habéis hecho lo imposible por colocarme una sonrisita en la cara. Mil gracias en serio.
En fin que os deseo lo mejor, que todo vaya igual de bien en el 2012 y que todos, absolutamente todos vuestros deseos se hagan realidad, porque nadie mejor que vosotros os lo mereceís.
Feliz año 2012 ;)
 

jueves, 29 de diciembre de 2011

Sobrenatural.

Yo no te esperaba, ni te ansiaba. Había perdido toda mi vida haciendo cosas que, en realidad no me llevaban a ninguna parte, y esta vez ... ¿ganar? Suena raro decir que te encontré allí, dónde nunca podría haber imaginado encontrarte. Que apareciste para reordenar por completo mi sistema, como llevas haciéndolo desde hace un año. A veces suena extraño decir que el tenerte hoy aquí, conmigo, me hace feliz. ¿Quién sabe cuánto puede durar esta fortuna? A mí ya no me importa porque aposté todo en el momento en el que te besé y te dije que sí. Aposté a que entraras en mi vida, y cambiaras las fichas a tu antojo, como quisieras, a que no sea solamente yo en las mañanas, ni por la tarde, ni por la noche... sino, a que seamos dos, tú y yo, dos personas con el mismo sentimiento, dos seres capaces de quererse. A eso aposté, a que seas mi felicidad, a que seas una parte de mi ser, de mi vida. ¿Y sabes? Ya no me importa perder, sé que contigo gané y sigo ganando... y más de lo que esperaba. Me diste más de lo que pedía, me entregaste tu locura y tus cosas. Hiciste de tus miedos, mis miedos. De tus problemas, los míos. Y de tu alegría, mi felicidad.
 

Y llegaste tú y el mundo se paró.

-Jaja, ¿no es gracioso?
+¿De qué te ríes? ¿Qué es tan gracioso?
-¡Todo! ¿No lo ves? Es gracioso que me preguntes sonriendo, es gracioso que yo hubiera estado a punto de tirar la toalla instantes antes de conocerte y que tú salieras de la nada, con tu sonrisa, tu sonrisa que me encanta, con tus miles de horas de conversación y tus tonterias. Es gracioso la manera en que apareciste y conseguiste hacerme olvidar todo.
+Eso que has dicho es precioso, pero no creo que lo hayas dicho en serio.
-¿Por qué?
+Porque yo no he hecho nada.
-¿Qué no? ¿Quieres saber realmente lo que has hecho?
+Sí.
-Existir.

No quiero que haya un después de ti.

Tu sonrisa. Tu jodida sonrisa. Temblar cada vez que te escucho, sentir la necesidad irremediable de comerte a besos, de sonreír como una idiota, de querer hacer mil planes contigo, de perdernos por ahí y de sentarnos debajo de un árbol a escuchar los pájaros cantar, acompañados de nuestra canción. De simplificar todo a un simple abrazo, a dos palabras, a tres sonrisas, a cuatro ojos. De no decir nada y a la vez decirlo todo. De oler tu piel, de que se erice la mía. De llorar de alegría, de que sea yo la que te seque las lágrimas. De soñar despiertos y darnos cuenta de lo que estamos viviendo. De gritar lo más fuerte posible que te quiero. De tumbarnos en la hierba a mirar al cielo.

miércoles, 28 de diciembre de 2011

El tiempo que vamos a estar juntos no se puede medir.

Nunca me cansaré de decirte al oído que eres lo único realmente mágico e increíble de mi vida, que la has convertido en un valle de rosas desde el mismísimo día que naciste.
Siempre has estado para mí, desde pequeñitos, desde que eramos unos enanos que no levantabamos un palmo del suelo. Desde el primer día que me regalaste una sonrisa y que mi madre me dijo: ''Mira, está es la nueva vecina, es muy pequeñita, así que tienes que protegerla, siempre'' Y eso he hecho toda mi vida. 
Defenderte de todas las personas que han intentado causarte algún daño. Sácarte de algún que otro problemita que has tenido, arreglárte las Barbies e incluso jugar contigo a las muñecas. 
He tenido claro desde entonces que te quería para siempre y que estaría junto a tí hasta el final de mi vida y hacer de la tuya la más feliz.
¿Cuántos años han pasado desde aquel día que te dije al oído en el parque que te quería? Treinta años. Pocos son. Era un crío cuando te regalé aquellas rosas y te di un beso en la mejilla. Pero era un crío con las ideas muy claras.
¿Y cuántos hacen que yo te dije la verdad de todo lo que sentía, te volvía a regalar flores y te pedía que fueras mi novia? Trece años. Trece años de besos y de abrazos. Trece años siendo tuyo y diez siendólo oficialmente. Aunque la realidad es que llevamos juntos treinta y siete años. Desde que naciste tú.
No me arrepiento de ningún momento vivído junto a ti y de los que nos quedan juntos, pequeña mía.
Soy tuyo desde aquel día que mi madre me llevó a tu casa para conocerte cuando a penas tenías unos meses. Cuando me regalaste la primera sonrisa. No ha habido ninguna otra. Nunca la habrá.


 

Mi calle va recta a tu cintura.

Arriesgarse, tirarse de cabeza, saltar y volar. Llorar, reír, cantar, sufrir, amar, bailar...
La vida está compuesta de estos pequeños momentos. Momentos que cada día se hacen más especiales y que a medida que creces se hacen más difíciles de realizar. 
También me he dado cuenta que lo más arriesgado de todo es estar contigo y vivir la vida a tu lado. Siempre me sorprendes y eso es lo más mágico de todo.

domingo, 25 de diciembre de 2011

FELIZ NAVIDAD

Ha llegado. Ha llegado el tiempo de la nieve, de los sueños, de las cenas en familia, del amor, de las fiestas y de los regalos. Ha llegado mi amiga, la Navidad.
 Espero que todos vuestros sueños y los míos, se hagan realidad.
JO, JO, JO, ¡FELIZ NAVIDAD!

sábado, 24 de diciembre de 2011

Cuándo estoy contigo se detiene el tiempo.

Quiero hacerte un regalo muy especial. Cierra los ojos y no los abras hasta que yo te diga ¿vale? 
Ahora dame la mano, la que tú quieras. Empezemos a caminar.
Cinco pasos en línea recta y lugo dos hacía la izquierda.
Te voy a contar mi plan. Seguramente si me has escuchado bien, me has tenido que reconocer al instante.
Verás, he leido una de tus fantásticas historias de cuentos de hadas que escribes cuando estás sola en tu habitación, y dado el hecho de que nos encontramos en una de las ciudades más hermosas y con más mágia del planeta, he pensado que quizás te haría ilusión salir a pasear conmigo a la luz de las estrellas.
Se que no nos ha dado a penas tiempo de ver nada porque a parte de que hemos estado muy ocupados, mañana mismo nos vamos.
Pues bien, mi plan es sencillo, bueno, mi plan no, tú plan.
Supongo que llevarás toda la noche preguntándote porque he dejado un vesitido tan elegante encima de la cama con una nota que reza 'PÓNTELO' 
¿Intrigada verdad? Tranquila, por el momento vamos a seguir caminando.
Veinte pasos rectos y para que hay un semáforo en rojo.
Cruzemos pues. Cuidado con los escalones. Así, dos, tres y cuatro escalones bajados.
Siempre quise venir contigo a éste país tan fantástico y romántico. 
Estuvo mal que leire tu pequeña historia sin pedir permiso, lo se, pero realmente esta bastante intrigado por saber que habías escrito en ese pequeño cuaderno que siempre te acompaña a todos sitios. 
Me maravilló tu sueño, tan tierno, tan encantador. 
Así que decidí armarme de valor y hacértelo realidad.
Haber para. Estáte quieta y no te muevas que te voy a destapar los ojos. ¿Estás temblando? Típico de tí. 
Estás tan linda así...
Venga, coge aire y mira al frente.
¿Te gusta?
+Me he quedado sin palabras...
-Lo suponía. Cómo ya sabrás ese hermoso monumento que tenemos a nuestra derecha no es ni más ni menos que la Torre Eiffel. Sabía que te encanta ese lugar, pero no hemos tenido tiempo de venir antes, a si que aquí estamos.
+Es precioso. Tú eres precioso. El vestido es magnífico; el lugar de ensueño. Es todo cómo lo había planeado...Sólo falta una cosa...
-Sí, falta la parte más importante. La que estaba subrayada de rosa en tu cuaderno...
+¿No irás a...?
-Calla, por favor. Déjame terminar. Te he traído aquí, no sólo para regalarte un recuerdo maravilloso y hacer realidad uno de tus sueños. No, también te he traido para hacer realidad los míos y para que jamás puedas sacarte este recuerdo de tu cabeza.
+Oh, dios mío..
-Queridísima mía, te pido aquí, en otro país, Francia, en una ciudad única, París y junto al monumento más romántico del mundo, la Torre Effel... ¿Querrías casarte conmigo y hacerme el hombre más feliz del mundo? Yo te prometo hacerte la persona más dichosa de todo el universo. ¿Enlazarías tu vida con la mía tanto cómo duren? ¿Amarme, respetarme bajo todas las circunstancias sean malas, regualares o peores? Te prometo que yo no daré un paso sin antes haberte dicho lo muchísimo que te amo. Juro que cada día de mi vida será solo para ti y que nada me va a poder separar de ti.
Dí que sí y desde este momento seré para tí hasta que me muera.
+¡Por supuesto que sí! Acepto casarme contigo, amarte, respetarte y estar contigo hasta el final.




 

viernes, 23 de diciembre de 2011

Por besarte.

Por besarte, mi vida cambiaría en un segundo.
Tú, tú serías mi equilibrio, mi destino.
¡Bésame! Sólo así podré tenerte eternamente en mi mente.
 

jueves, 22 de diciembre de 2011

Que estés conmigo, eso es lo que quiero.

Hagamos un pacto, es muy sencillo. Yo prometo quererte cada día un poco más, estar a tu lado en las buenas, malas, regulares y peores, no dejarte ni un solo momento, decirte cada día lo que me gustas, lo que me encantas, que estoy colada por ti hasta los huesos. Prometo darte un beso cada día y un abrazo cuando te vea, en las despedidas, o, simplemente cuando necesite dártelo. Te prometo que voy a llorar contigo y que también me voy a reír, que vamos a pasar días inigualables, inimaginables, perfectos, de locura, llenos de momentos que jamás olvidaremos, con mil y una sorisas, llenos de besos, cariño, de abrazos, llenos de ti, llenos de mí pero también te aviso que habrá más de una tarde que no me aguantaré ni yo misma, pero intentaré no pagarlo contigo.
Te prometo que cuando nadie te entienda, cuando te sientas solo, cuando no sepas a quién acudir, yo voy a estar ahí para comprenderte, animarte y sacarte una sonrisa de esas que tanto me gustan. Te prometo que día tras día aprenderé a quererte como quieres que te quiera, aprenderé a ver tus cualidades y a ayudarte a superar tus defectos. También prometo cambiar las cosas que te molestan para así poder hacerte feliz. Prometo encontrar un lugar solo para nosotros dónde tumbarnos para ver las estrellas, dónde poder hablar de nuestras cosas, dónde poder decirte que te quiero, que eres mi vida. Prometo dedicarte cada hora, cada minuto, cada segundo, e incluso, cada milésima de segundo de mi vida, toda es para ti, porque quiero pasarla a tu lado. Prometo hacerte sonreír, hacerte sentir único, especial. Prometo amarte y no quedarme en quererte. A cambio de todo esto, yo no te pido nada, sólo que estés conmigo para siempre.

No te enamores, que el amor no es bueno.

Cuando pierdes el tiempo al teléfono, cuando los minutos pasan sin que te des cuenta, cuando las palabras no tienen sentido, cuando piensas que si alguién te escuchara creería que estás loco, cuando ninguno de los dos tiene ganas de colgar, cuando después de que ella haya colgado compruebas que lo ha hecho de verdad, entonces estás perdido... O mejor dicho, estás enamorado, lo que, en realidad, es un poco lo mismo.
 

Remember.

Todo lo que debes hacer es ponerte los cascos, echarte en el suelo y escuchar el CD de tu vida. 
Pista tras pista, ninguna se puede saltar, todas han pasado de una forma u otra, servirán para ir hacia adelante.
No te arrepientas, no te juzgues. Sé quien eres, y no hay nada mejor en el mundo. Pausa, rebobina, play, aún, aún y aún más.
Nunca detengas el reproductor, sigue registrando sonidos para lograr explicar el caos que tienes dentro, y si te sale una lágrima cuando la escuchas, no tengas miedo, es como la lágrima de un fan cuando escucha su canción preferida. 

Seré todo. Todo lo que desees.

+Ya conoces mis sentimientos, por supuesto. Estoy aquí, lo que, burdamente traducido, significa que preferiría morir antes que alejarme de tí...Soy idiota.
-Eres idiota.-Aceptó con una sonrisa.

Mentiras y más mentiras.

No te creas todas esas mentiras que te dices: todas esas mentiras que tú nunca escogiste, pero que fuiste programado para ceer. No te creas a ti mismo cuando te dices que no eres lo bastante bueno ni lo bastante fuerte ni lo bastante inteligente. No te creas tus propias limitaciones y dificultades. No te creas que no eres digno de amor o de felicidad. No te creas que no eres bello. No te creas ninguna cosa que te haga sufrir. No creas en tu desdicha. No creas en tu propio juez o en tu propia víctima. No te creas la voz interior que te dice que eres estúpido, que te dice que te suicides. No te la creas porque no es verdad. Abre tus oídos, abre tu corazón y escucha. Cuando oígas que tu corazón te conduce hacia la felicidad, entoncez haz una elección y mantenla. Pero no te creas a ti mismo sólo porque es algo que estás acostumbrado a decir, porque más del ochenta por ciento de las cosas que crees se basa en la mentira: no son verdad.

 

Nuevo minuto.

El tiempo pasa incluso aunque parezca imposible, incluso a pesar de que cada movimiento de la manecilla del reloj duela como el latido de la sangra al palpitar detrás de un cardenal. El tiempo transcurre de forma desigual, con saltos extraños y treguas insoportables, pero pasar, pasa. Incluso para mí.
 

Perdona, pero no lo olvides.

Hay ocasiones en las que uno tarda una fracción de segundo en aceptar la brusca ausencia de todo lo que le ha pertenecido: igual que la luz es más veloz que el sonido, la conciencia es más rápida que el dolor, y nos deslumbra cómo un relámpago que sucede en silencio. Por eso aquella noche no sentía nada. El verdadero dolor llegó varias horas más tarde, y fue entonces cuando quiso recordar una por una las palabras que los dos habían dicho y no pudo lograrlo. Supo que la ausencia era esa neutra sensación de vacío.

No te canses de ser fuerte.

¿Cómo lo haces? ¿Cómo consigues ser fuerte, luchar día tras día, que la sonrisa no se te borre de la cara nunca, cómo? Lo intenté y creía que lo había conseguido, pero no, no es así, sonrío todos los días, hago la pava con mis amigas, nos reímos de los viejos tiempos y gracias a eso me olvido de los malos. Por que esos momentos me han enseñado a no entristecerme por nada, a luchar, a reír siempre, a ser fuerte... ¿Por qué ese sentimiento siempre vuelve? Es como si jugara al escondite y de repente saliera del suyo jodiéndome y salvándose. A lo mejor es por el sueño, por mi inseguridad, por el cansancio, por la desconfianza hacia los demás... Yo solo quiero que ese sentimiento disminuya hasta que desaparezca... Explícame como consigues alejar los fantasmas del pasado para que no se metan en tu mente y se amarren a ella sin soltarse, provocándote un dolor inexplicable... No logro comprender por qué no puedo ser como antes, con esas ganas de comerme el mundo, con esa energía para poder luchar y seguir siendo fuerte, ¡cómo antes! Por que me canse de luchar y de pasar de todo, de hacer que todo me da igual y hacer que mis sentimientos desaparezcan... No se la verdad... Dicen que a veces la gente llora no porque sean déviles, sino porque llevan demasiado tiempo siendo fuertes, ¿eso es verdad? Eso espero, no quiero que sea mentira, no quiero pensar que mi momento de ser fuerte acabó, no quiero creer que la confianza hacía los demás la he tenido que mandar a la mierda para poder sobrevivir y poder ser fuerte, ¿y solo para qué? Para que todo acabe... Me he acostumbrado a esta manera de vivir, ¡esto ya es mi vida! Estos sentimientos no pueden venir ahora como si nada y jodérmela. No, no lo harán.

De aquí al infinito.

Venga, vale, vámonos al fin del mundo, donde las noches son largas y los días cortos, vámonos allí dónde tú quieras llevarme. Venga, no tengo miedo, jamás me apartaré de tu lado, estoy cansada de decirte que eres lo único que necesito para seguir viviendo, que mi felicidad tiene nombre y apellidos, los tuyos. Que llevo toda mi vida esperando este momento, esperándote a ti. Qué si tú me dices ven, lo dejo todo y que hay veces que no hace falta que me digas ven, porque puedo ver en tus ojos que estas deseando que nos escapemos juntos, que quieres descubrir lugares nuevos y que vivamos nuestra propia vida, juntos, donde nada ni nadie jamás podrá separarnos. Se de sobra que no soy la tía perfecta, quizás ni si quiera soy como me imaginabas. Tal vez no sea la más adecuada para ti, pero ¿sabes? Hay algo dentro de ti que me pide que no me vaya nunca, que me quede a tu lado para siempre. Eso haré. Pero solo quiero que me quieras como nunca antes has querido a nadie. 
 

martes, 20 de diciembre de 2011

Invierno.

Invierno. Frío, lluvia, nieve, etc.
Es el mejor momento para pasarme el día abrazada a ti. Pasarme el día entero queriéndote.
No separarme ni un solo segundo de tu lado; un sueño.
Quiero estar a tu lado muchísimos inviernos más.
Me encanta abrazarte cada noche y sentirte tan cerca.
Me niego a pasar otro invierno más abrazada al radiador de mi habitación, sola y sin nadie que me abraze.
 

sábado, 17 de diciembre de 2011

Si puedes quitarmelo, quítamelo; si no puedes, fuera de mi camino.

No eres diferente. Ni siquiera eres especial...Bueno, quizás para mí si que seas todo eso y tal vez hasta más.
Eres apuesto, dulce, fuerte, confiado, cabezota e incluso gracioso.
De los fáciles; de lo que creen que todo es posible y al que puedes conquistar dándole cariño.
No eres interesado y te encanta divertirte. Un niño pequeño en el cuerpo de un adulto.
Típico tío que todas quieren tener y siempre es el ''mejor amigo''
Todas le dicen lo mismo: ''¡Tú eres mi prototipo de chico perfecto!'' pero que nunca será algo más.
Pocas se habían fijado en él, porque, como ya he dicho, no es un chulo ni el más malote de la clase, al contrario. Es el niño tímido y bueno. 
Aparenta todo lo que no es, y puede que su apariencia no te guste mucho, pero si llegas a conocerle un poco es el mejor tío que jamás te vayas a encontrar.
Su forma de ver la vida, sin preocupaciones y dejando el futuro a parte, choca un poco, es verdad.
Pero yo fuí la que lo encontró. Yo fui la primera para casi todo. Yo le he enseñado casi todo lo que sabe. MÍO.
Antes, ninguna se fijaba, ahora todas lo quieren.
Mala suerte, muñecas. Llegaís con un año de retraso, así que fuera de nuestro camino, pandilla de zorras.

martes, 13 de diciembre de 2011

Tal cuál.

Ahora quiero que me escuches atentamente, sí, tú.
El que dice que no tengo ovarios de abrir mi cabeza por un instante y mostrarle al mundo quien soy, que pienso y de que estoy hecha.
Pues estáte atento porque hoy quizás descubras cosas mías increíbles y otras no tan increíbles, pero que sólo oíras una vez, nada más.
Sí, es cierto que tengo una adicción demasiado fuerte a todo lo que sea dulce.Que adoro el chocolate por encima de todas las cosas de este mundo.
También es cierto que lo amargo me atrae y que aunque cuando lo pruebe me deje un sabor horrible en la boca me hago adictiva. Soy demasiado masoquista, supongo.
Siempre me he vuelto loca con Robert Pattinson. No puedo evitarlo, es verlo y comenzar a pegar gritos como una loca.
Aunque también es cierto que de la única persona que estoy enamorada es de él. Del chico de mis sueños que me ha regalado una sonrisa cada día de mi vida desde hace un año. Es único e incomparable. Dudo de que queden chicos igual de guapos tanto por fuera como por dentro.
Me encanta reírme con los que de verdad se merecen oírme reír, pero tengo que decir que las bromas me ponen los pelos de punta. No las soporto.
Podría decirte que si me gastas una broma y me siente mal, quizás no vuelva a hablarte en toda mi vida. Demasiado estúpida.
Siempre tiendo la mano a quien de verdad se la merece y a quien a mí me caiga bien. 
¿Me caes mal? Entonces no esperes que te tienda la mano cuando la necesites.
Expreso mis sentimientos con cualquiera. Si estoy mal y apareces de repente me va a dar igual conocerte o no, te contaré mis problemas en cuánto preguntes ''¿Qué tal estás?''
También soy una arrogante, creida y demasiado excéptica. Me creo el centro del mundo, es cierto, pero pienso que si no me preocupo yo de mi misma, ¿quién lo hará? Nadie.
Te ayudaré siempre y cuando en algún momento de mi vida, tú me has ayudado a mí. Entonces no me lo pensaré dos veces y te ofreceré mi mano, no una sola vez, veinte si es necesario, incluso cien.
Cuando me quito mi coraza de ''me-importa-todo-una-mierda'' soy la tía más sentimental que te vayas a encontrar en tu camino, la más tierna, la más frágil pero también la más borde.
A veces pasa que de lo buena que soy, soy tonta. Es ahí dónde cojo mi super coraza, me la coloco y ya todo me da igual.
He llegado a desearle la muerte al primer gilipollas que se ha pasado conmigo. Tengo esa manía, ni perdono ni olvido.
Soy demasiado rencorosa, tanto, que si dentro de unos cincuenta años nos encontraramos y tú en algún momento de tu vida, has intentado joderme la mía, ni me lo pienso: te tiró delante del primer coche que pase.
No soy difícil de conquistar y mucho menos de enamorar, ya lo he dicho varias veces. Con unas cuantas palabras bonitas y dos o tres sonrisas me tienes en tus manos.
Pero también soy una de las tías más difíciles de conservar, dicho por muchas personas.
Igual de rápido que llego me voy. No esperes que esté en tu vida demasiado tiempo.
Pero cuándo pasa que me enamoro, como está vez, quizás me tengas detrás de ti para siempre, aunque, claro está, nunca me arrastraré por ti.
Puedes llamarme de todo, que no me lo voy a tomar a mal, al contrario, soy la primera que dice que soy una zorra. Una grandísima zorra.
Pero no me avergüenzo de ello. Sé reconocer lo que soy.
Tengo el corazón cosido con hilo de todas las veces que me lo han roto. Puedo parecer muy fuerte, pero mi pobre corazón es tan dévil que de tantos golpes y caídas está para tirarlo y comprar uno nuevo.
Es lo que pasa de tantos golpes y caídas, que aprendes a sobrellevarlo todo como puedes y a no fiarte ni de tu sombra, aunque en mi caso parece que no aprendo.
Sigo confiando en algunas personas que un día me jodieron la vida, pero como los quiero tantísimos, aquí me tenéis perdonando una a una todas las putadas que me han hecho. Lo que yo os diga, de buena que soy, tonta.
Pero me estoy recomponiendo poco a poco y aprendiendo a no perdonar más de una capullada.
Otra cosa, adoro el rosa y la ropa conjuntada. Odio que me digan pija porque yo no soy de esas niñatas tontas que sólo piensan en ropa y en chicos.
Otros me llaman hippie por llevar el símbolo de la paz colgado del cuello. Que gente más imbécil. No soy hippie, no soy pija, no soy choni ni siquiera soy normal. 
Soy Noelia. Sólo eso. Sin estilos, sin normas, sin símbolos característicos. Nada. Sólo yo.
Esto es así de fácil: si tú me respetas y me aceptas tal y cómo yo soy, yo te acepto y te respeto sin poner ninguna pega y valorándote por lo que eres, no por lo que intentas aparentar.
¿Ves ahora a lo que me refería con que habría cosas de mí que no te gustarían?
Por esta razón no abro mi cabeza muy a menudo, al contrario, la cierro todo lo que puedo. 
Estoy cansada de que la gente me juzgue y me condene así sin más. No quiero que nadie me diga como tengo o debería de ser.
Soy así. Nadie puede cambiar eso. Ni siquiera yo misma me podría cambiar.
Acostumbraros a vivir con eso, porque es algo que os digo yo, que me conozco bastante bien, que no va a cambiar nunca.

jueves, 8 de diciembre de 2011

Olvida toda la mierda que hemos pasado, quiero quedarme contigo por siempre.

Tenías razón. Yo no sabía lo que quería. Pensé que lo nuestro estaba muerto y que ya nada podría salvarlo...Y me fuí. Me fuí para que, aunque fuera, uno de los dos pudiesemos ser felices y no hacerte más daño.
Me fuí por los dos. 
Pero me equivoqué. Me di cuenta tarde del error.
Entonces decidí volver. Volver a decirte que te amo, que no se vivir sin ti. Que no soy capaz de dormir si no te tengo al lado. Que mis días son interminables y no encuentro la manera de ser feliz sin ti.
...Y cuando volví tú ya no estabas. Te habías ido. Lo único que encontre en la casa fue una foto nuestra encima de la mesa y una carta. 
Una carta que me contaba que me entendias, que no me guardabas rencor y que sabías que tarde o temprano esto ocurriría porque llevabamos muchos años así.
Que me deseabas lo mejor y que ojala pudiera ser feliz como realmente deseo y que si por cualquier cosa volvía y encontraba esta carta que supiera que tú también te habías ido; que ibas a cambiar de aires y a intentar olvidarme. 
Y que me amas. Como a nadie y como nunca, aunque, por desgracia, yo no siente lo mismo.
Me derrumbo. Nada me queda sin ti.
He sido imbécil. He abandonado al amor de mi vida por mis malditos miedos.
Lo perdí. Para siempre.
Que vacía me siento sin ti...
Ojala algún día nos encontremos y nada haya cambiado. 
Que me sigas queriendo tanto como dices.
Prometo arrepentirme cada día de mi existencia por aquel maldito día que te abandoné.
Prometo esperarte.

miércoles, 7 de diciembre de 2011

Nunca más sin ti.

Me besa. Me dejo besar. Me toca. Le toco. Me sonríe. Me derrito. Se muerde el labio. Se me mueve hasta el alma.
-¿Cuánto tiempo más vamos a estar así? - le digo retirándome un paso.
+¿Estar cómo? Si estamos de maravilla ahora mismo.- Me atrae y saca una de sus sonrisas más pícaras.
-No, en serio. ¿Hasta cuándo piensas que vamos a seguir viéndonos a escondidas? - Me aparto y lo miró muy seria. Aspiro una bocanada de aire y cierro los ojos - ¿Hasta cuándo voy a seguir siendo la otra?
Se queda muy rígido y muy serio. Afloja su abrazo y deja caer las manos a los lados de mi cintura.
+No lo sé... Sabes que intento hacer las cosas bien...
-Pués esto no es precisamente hacer las cosas bien - Le atajo - Joder, no se quién es ella pero creo que no se merece esto...
+Lo se, lo se, ¿¡vale!? ¡Lo se, joder! - se da media vuelta y se lleva las manos a la cabeza
-Pero, tranquilo, no te pongas así. No he pretendido enfadarte... - Le intentó coger las manos y se aparta. Mierda, la he liado.
+No. No tienes la culpa, sí en realidad tienes razón... - Se derrumba y se sienta en una silla - No se como cojones he sido capaz de hacerle algo así a ella. No se lo merece.
Joder, joder, joder, ¡JODER!
No puede dejarme ahora; no va a dejarme ahora ¿verdad?
-¿Eso significa que lo nuestro...se va a acabar? - Se me quiebra la voz en la última palabra.
+¿Qué? no, ¡NO! - Se levantá y toma mi cara entre sus manos - Eso significa que tengo que dejar de hacerle daño y decirselo de una vez por todas. No puedo alejarme de ti. No tengo la suficiente fuerza - Me besa - No voy a vivir sin ti. No puedo vivir sin ti.
-Yo tampoco, lo sabes.