sábado, 25 de mayo de 2013

La suerte de tropezarnos cuando más falta nos hacía conocernos.

Parece que las cosas me van mucho mejor, que la racha de días malos por fin han tocado a su fin. Y es gracias a ti, que has aparecido cuando más falta me hacías.
Gracias, de verdad, gracias. Supongo que las cosas buenas también me pueden pasar a mí, que el mundo también puede ser bonito desde mi punto de vista. 
Ya sabes que no creo en los "para siempre" ni en los "eternamente", pero si creo en ti, en mí y en nosotros. Creo que se puede escribir una gran historia a partir de todas esas cenizas que quedaron por barrer y creo que esos ojos verdes no pueden dejar de brillar nunca. 
Y también creo que quiero que seas solo mío, pequeño idiota.