jueves, 22 de diciembre de 2011

Que estés conmigo, eso es lo que quiero.

Hagamos un pacto, es muy sencillo. Yo prometo quererte cada día un poco más, estar a tu lado en las buenas, malas, regulares y peores, no dejarte ni un solo momento, decirte cada día lo que me gustas, lo que me encantas, que estoy colada por ti hasta los huesos. Prometo darte un beso cada día y un abrazo cuando te vea, en las despedidas, o, simplemente cuando necesite dártelo. Te prometo que voy a llorar contigo y que también me voy a reír, que vamos a pasar días inigualables, inimaginables, perfectos, de locura, llenos de momentos que jamás olvidaremos, con mil y una sorisas, llenos de besos, cariño, de abrazos, llenos de ti, llenos de mí pero también te aviso que habrá más de una tarde que no me aguantaré ni yo misma, pero intentaré no pagarlo contigo.
Te prometo que cuando nadie te entienda, cuando te sientas solo, cuando no sepas a quién acudir, yo voy a estar ahí para comprenderte, animarte y sacarte una sonrisa de esas que tanto me gustan. Te prometo que día tras día aprenderé a quererte como quieres que te quiera, aprenderé a ver tus cualidades y a ayudarte a superar tus defectos. También prometo cambiar las cosas que te molestan para así poder hacerte feliz. Prometo encontrar un lugar solo para nosotros dónde tumbarnos para ver las estrellas, dónde poder hablar de nuestras cosas, dónde poder decirte que te quiero, que eres mi vida. Prometo dedicarte cada hora, cada minuto, cada segundo, e incluso, cada milésima de segundo de mi vida, toda es para ti, porque quiero pasarla a tu lado. Prometo hacerte sonreír, hacerte sentir único, especial. Prometo amarte y no quedarme en quererte. A cambio de todo esto, yo no te pido nada, sólo que estés conmigo para siempre.

No te enamores, que el amor no es bueno.

Cuando pierdes el tiempo al teléfono, cuando los minutos pasan sin que te des cuenta, cuando las palabras no tienen sentido, cuando piensas que si alguién te escuchara creería que estás loco, cuando ninguno de los dos tiene ganas de colgar, cuando después de que ella haya colgado compruebas que lo ha hecho de verdad, entonces estás perdido... O mejor dicho, estás enamorado, lo que, en realidad, es un poco lo mismo.
 

Remember.

Todo lo que debes hacer es ponerte los cascos, echarte en el suelo y escuchar el CD de tu vida. 
Pista tras pista, ninguna se puede saltar, todas han pasado de una forma u otra, servirán para ir hacia adelante.
No te arrepientas, no te juzgues. Sé quien eres, y no hay nada mejor en el mundo. Pausa, rebobina, play, aún, aún y aún más.
Nunca detengas el reproductor, sigue registrando sonidos para lograr explicar el caos que tienes dentro, y si te sale una lágrima cuando la escuchas, no tengas miedo, es como la lágrima de un fan cuando escucha su canción preferida. 

Seré todo. Todo lo que desees.

+Ya conoces mis sentimientos, por supuesto. Estoy aquí, lo que, burdamente traducido, significa que preferiría morir antes que alejarme de tí...Soy idiota.
-Eres idiota.-Aceptó con una sonrisa.

Mentiras y más mentiras.

No te creas todas esas mentiras que te dices: todas esas mentiras que tú nunca escogiste, pero que fuiste programado para ceer. No te creas a ti mismo cuando te dices que no eres lo bastante bueno ni lo bastante fuerte ni lo bastante inteligente. No te creas tus propias limitaciones y dificultades. No te creas que no eres digno de amor o de felicidad. No te creas que no eres bello. No te creas ninguna cosa que te haga sufrir. No creas en tu desdicha. No creas en tu propio juez o en tu propia víctima. No te creas la voz interior que te dice que eres estúpido, que te dice que te suicides. No te la creas porque no es verdad. Abre tus oídos, abre tu corazón y escucha. Cuando oígas que tu corazón te conduce hacia la felicidad, entoncez haz una elección y mantenla. Pero no te creas a ti mismo sólo porque es algo que estás acostumbrado a decir, porque más del ochenta por ciento de las cosas que crees se basa en la mentira: no son verdad.

 

Nuevo minuto.

El tiempo pasa incluso aunque parezca imposible, incluso a pesar de que cada movimiento de la manecilla del reloj duela como el latido de la sangra al palpitar detrás de un cardenal. El tiempo transcurre de forma desigual, con saltos extraños y treguas insoportables, pero pasar, pasa. Incluso para mí.
 

Perdona, pero no lo olvides.

Hay ocasiones en las que uno tarda una fracción de segundo en aceptar la brusca ausencia de todo lo que le ha pertenecido: igual que la luz es más veloz que el sonido, la conciencia es más rápida que el dolor, y nos deslumbra cómo un relámpago que sucede en silencio. Por eso aquella noche no sentía nada. El verdadero dolor llegó varias horas más tarde, y fue entonces cuando quiso recordar una por una las palabras que los dos habían dicho y no pudo lograrlo. Supo que la ausencia era esa neutra sensación de vacío.

No te canses de ser fuerte.

¿Cómo lo haces? ¿Cómo consigues ser fuerte, luchar día tras día, que la sonrisa no se te borre de la cara nunca, cómo? Lo intenté y creía que lo había conseguido, pero no, no es así, sonrío todos los días, hago la pava con mis amigas, nos reímos de los viejos tiempos y gracias a eso me olvido de los malos. Por que esos momentos me han enseñado a no entristecerme por nada, a luchar, a reír siempre, a ser fuerte... ¿Por qué ese sentimiento siempre vuelve? Es como si jugara al escondite y de repente saliera del suyo jodiéndome y salvándose. A lo mejor es por el sueño, por mi inseguridad, por el cansancio, por la desconfianza hacia los demás... Yo solo quiero que ese sentimiento disminuya hasta que desaparezca... Explícame como consigues alejar los fantasmas del pasado para que no se metan en tu mente y se amarren a ella sin soltarse, provocándote un dolor inexplicable... No logro comprender por qué no puedo ser como antes, con esas ganas de comerme el mundo, con esa energía para poder luchar y seguir siendo fuerte, ¡cómo antes! Por que me canse de luchar y de pasar de todo, de hacer que todo me da igual y hacer que mis sentimientos desaparezcan... No se la verdad... Dicen que a veces la gente llora no porque sean déviles, sino porque llevan demasiado tiempo siendo fuertes, ¿eso es verdad? Eso espero, no quiero que sea mentira, no quiero pensar que mi momento de ser fuerte acabó, no quiero creer que la confianza hacía los demás la he tenido que mandar a la mierda para poder sobrevivir y poder ser fuerte, ¿y solo para qué? Para que todo acabe... Me he acostumbrado a esta manera de vivir, ¡esto ya es mi vida! Estos sentimientos no pueden venir ahora como si nada y jodérmela. No, no lo harán.

De aquí al infinito.

Venga, vale, vámonos al fin del mundo, donde las noches son largas y los días cortos, vámonos allí dónde tú quieras llevarme. Venga, no tengo miedo, jamás me apartaré de tu lado, estoy cansada de decirte que eres lo único que necesito para seguir viviendo, que mi felicidad tiene nombre y apellidos, los tuyos. Que llevo toda mi vida esperando este momento, esperándote a ti. Qué si tú me dices ven, lo dejo todo y que hay veces que no hace falta que me digas ven, porque puedo ver en tus ojos que estas deseando que nos escapemos juntos, que quieres descubrir lugares nuevos y que vivamos nuestra propia vida, juntos, donde nada ni nadie jamás podrá separarnos. Se de sobra que no soy la tía perfecta, quizás ni si quiera soy como me imaginabas. Tal vez no sea la más adecuada para ti, pero ¿sabes? Hay algo dentro de ti que me pide que no me vaya nunca, que me quede a tu lado para siempre. Eso haré. Pero solo quiero que me quieras como nunca antes has querido a nadie.