domingo, 9 de junio de 2013

Desastre bonito el nuestro.

Y te juro que siempre lo tenía decidido,que hacía las maletas y me iba, que siempre pensaba que todo se iba a la mierda. 
Fanática de los para siempre, de los amores eternos, de los "te quiero" a media voz, nunca tuve la valentía suficiente para alejarme. ¿Y qué le hago? ¿Qué solución se le puede dar a todo este caos que nos identifica? 
Siempre pensando en el tiempo, en la incertidumbre, en el querer y no poder estar a tu lado. De aquí no salimos vivos. ¿Cómo sobrevivir a todo esto? ¿Cómo irme de aquí, alejarme de ti después de todo? Que sí, que sí, que tú tienes razón, que las cosas no siempre pueden ser buenas, pero tampoco pueden ser siempre malas, ¿no crees? Eso de entendernos es muy bonito cuando las noches se vuelven cortas y estamos en una superficie horizontal con tu cuerpo encima.
Siempre igual, siempre la misma historia, siempre el miedo a fallar, a terminar por los suelos. Siempre tú y siempre yo. Siempre nosotros, o eso queríamos ser. 
"Me voy, ya no lo soporto más", siempre digo lo mismo y de repente, apareces y "te quiero, pequeña" ¡pum! a la mierda todo.
Me quedo.